Ha pasado bastante tiempo desde mi última visita prospectora a Baldaio, quizás mucho más del que yo hubiese querido. Este sábado, cuando llego a las 8 y pico de la mañana, Baldaio está desierto, no hay ni un alma, que sensación más estupenda, tan sólo me recibe en el aparcamiento con su canto y sus escarceos la pareja de Cogujada Común Galerida cristata.
El dia está anticiclónico, la temperatura es fabulosa y me pateo toda la laguna norte, bordeándola por el dique central en el sentido de las agujas del reloj. No hay demasiada bichería, unas pocas gaviotas patiamarillas y sombrías nada destacable, de limícolas algunos claramente permanecen desde el invierno (4 Archibebes Claros Tringa nebularia, Zarapìto Real Numenius arquata), o pasando unos pocos Correlimos Comunes Calidris alpina, Chorlitejo Grande Charadrius hiaticula y 2 adultos Archibebe Común Tringa totanus y algún Zarapito Trinador Numenius phaeopus.
De entre los paseriformes, destaca la observación de varios individuos machos de Collalba Gris Oenanthe oenanthe en paso hacia el norte, de la pocas que tengo en Baldaio, pués es más habitual verla en paso de otoño.
Macho de Collalba Gris Oenanthe oenanthe en las dunas de Mortaxa, Baldaio, 10-04-2010. Al fondo se ve el núcleo costero de Razo.
Otro macho de Oenanthe oenanthe sobre unos palés en el dique central, conocido antiguamente como "dique de os carreteiros" que divide la laguna norte y sur y que servía de via a los camiones para extraer arena durante los años sesenta.
Me acerco a la zona de Sambade en el fondo de la marisma oeste de Baldaio, un lugar que solía frecuentar mucho, pero al que no iba desde hace algunos años. Me quedo asombrado como ha cambiado la estructura de la vegetación en esta zona. Lo que era un junquera pura de Juncus maritimus con alguna mancha de Scirpus maritinus y muy parchaeda, es ahora una junquera espesa y muy colonizada de otros macrófitos como Iris pseudocorus y muy cerrada de Sauces Salix sp. por sus márgenes.
Se nota mucho el abandono de prácticas tradicionales como la corta de junco y el pastoreo de ganado vacuno, que le proporcionaba su aspecto característico. En esta zona, precisamente escucho el canto nupcial de un macho de Rascón Rallus aquaticus, especie que en el conjunto de estas marismas según estimaciones propias de finales de los años 90 albergaba un mínimo de 15-30 parejas.
Junquera de Juncus maritimus, uno de los hábitats típicos del Rascón Rallus aquaticus, en Baldaio.
Vista actual del fondo de la marisma de Sambade en Baldaio.
No podía faltar la observación con la nota de color de los que no respetan, en este caso un grupo de quads que circulaba en el entorno inmediato de la ZEPA.
Finalmente, en el mar todavía 4 indvs. de Colimbo Grande Gavia immer en muda todos y paso flojo de Pardela Cenicienta Calonectris diomedea.