lunes, 20 de julio de 2009

Pagaza piconegra

Primer invierno de Charrán patinegro Thalasseus sandvicensis

El pasado 9 de julio, un compañero Asturiano Adolfo Villaverde observó una Pagaza piconegra (Gelochelidon nilotica). Aunque es una de las más terrestres del grupo de las golondrinas de mar (está colonizando muchos embalses del interior) y a pesar de que se reproduce en algunas de las zonas húmedas más meridionales de la península (marismas del Guadalquivir, Albufera,...), Andalucía, Extremadura o la Mancha húmeda, yo personalmente nunca la observé en Baldaio. No obstante existen un puñadito de citas en Baldaio, algunas más antiguas y otras recientes.

Como casi siempre, José Antonio de Souza "el profesor" de Baldaio para muchos de nosostros, suma de 6 observaciones positivas 3 son en Baldaio y una de ellas recientemente.

Baldaio es una zona interesante y con un flujo bastante notable de charranes en migración como ya se tiene demostrado con observaciones más que notables en el conjunto peninsular como prueba de ello son por ejemplo las observaciones de Charrán rosado (Sterna dougallii) o Pagaza piquirroja (Sterna caspia) y los conspícuos pasos siempre de charranes comunes y árticos, Charrancito (Sterna albifrons) y por supuesto Charrán patinegro (Thalasseus sandvicensis).

domingo, 12 de julio de 2009

Arrinconados en las playas



Bueno como decíamos, el Chorlitejo Patinegro, con la excepción de lugares puntuales en los que se están acometiendo algunas medida de protección (P.N. de Corrubedo, Baixo Miño), sufre una serie de agresiones (destrucción del hábitat,presión turística, y un largo etc) que muchas veces te hacen pensar, como es posible que esté magnífico especialista de la arena, pueda subsistir en nuestras playas, intentando la cría temporada tras temporada.

Esto es exactamente lo que se observa, cuando llegas a una playa medianamente conservada un día de sol con afluencia masiva de turistas.

Recientemente, me llevé una grata sorpresa en la zona del Barbanza (zona en la que actualmente trabajo) y concretamente en unas playas, en las que si bien, había algún dato previo de cría de la especie, no lo debe de hacer de forma regular, ya que el tamaño, conservación y ausencia de medidas en las mismas, hace que su presencia como reproductor, seguramente sea cuando menos esporádica o excepcional.
Las playas en las que detecté la presencia y cría de la especie en algunos casos, fueron las siguientes:

Playa de Aguieira (Porto do Son) A Coruña.
Se trata de una playa pequeña de algo más de 1 Km. de longitud que cuenta con un pequeño cordón de dunas de unas 3-4 ha. de supèrficie, protegido mediante una pasarela y que es muy frecuentada por turistas. A mediados del mes de Junio, se confirma la cría de la especie y la presencia de un mínimo de dos parejas y un macho posiblemente custodiando a un pollo ya volantón.

Playa de Queiruga ou as Furnas (Porto do Son).
A Coruña. Es otra playa de algo más de 1 Km de longitud con mayor ancho de cabecera y menor desarrollo y establecimiento de cordón y vegetación dunar (algo más de 2 ha. de superficie), además de no estar protegido por pasarela peatonal de acceso a la playa. A pesar de esto, se localizan dos parejas territoriales el 11 de Junio, una de ellas en plena fase de cópulas y construcción de cuencos.

Playa de Carregueiros (Boiro). A Coruña.
Confirmación de cría en la zona, se desconoce si lo hizo en la playa misma o en algún islote cercano. En esta playa su cría era conocida en los años 70, antes de que se destruyera la duna y se alterara gravemente la playa y entorno. El día 6 de Julio se localiza en el arenal a un macho adulto guiando a dos pollos volantones.

Unas mínimas medidas de gestión
a nivel de los Concellos para salvaguardar estas pequeñas poblaciones de agresiones; como limpiezas innecesarias o excesivas con maquinaria pesada en las cabeceras de playas, tránsito libre de gente y animales domésticos por los cordones dunares y zonas de cría en las épocas críticas de reproducción y señalización, vigilancia y seguimiento, se antojan como necesarias e improrrogables en estos tiempos. Por ello deberíamos de trabajar.